No hay día en que las personas no aprendan algo de los animales, especialmente si los ven con mucha frecuencia como es el caso de las mascotas.
Cuando Jennifer Tripucka adoptó a la perrita Andi del refugio Wise Animal Rescue en New Jersey (Estados Unidos), supo en ese momento que siempre estaría para ella, pero nunca imaginó que la mascota de 4 años se apegaría tanto a un cerdito de juguete.
La shih tzu fue salvada de su vida anterior, donde la utilizaban para la reproducción pero gracias a sus rescatistas ha podido salir adelante y conocer el amor que su familia le ha dado, además del muñeco rosado que se ha convertido en su favorito.
“Andi encontró el cerdito en el contenedor de juguetes e inmediatamente comenzó a llorar y chirriar en su hocico. Luego lo llevaba por toda la casa, dando vueltas, llorando y protegiéndolo”, contó Jennifer a The Dodo. Un hábito que ha registrado en su cuenta de TikTok.
Además la shih tzu no dejaba que sus hermanos caninos se acercaran al cerdito y les ladraba cada vez que lo intentaban, y esto no pasó desapercibido para la dueña. Cuatro días después de esterilizarla, un veterinario le explicó que se trataba de un “embarazo fantasma”, algo que puede ocurrirle a las perritas tras la cirugía.
“Ella también trata de amamantarlo. A veces se olvida, sale del área donde está y da vueltas buscándolo y llorando. Luego lo encuentra y se muda a un nuevo lugar para anidar. Tiene el tamaño perfecto, como podrían ser sus cachorros”, explicó Jennifer al medio.
Sin embargo, Andi no es una mascota malhumorada y ni mucho menos egoísta. Vive junto a sus hermanos Finn, que también fue adoptado del refugio, y Pierre, el cual padece cáncer y la compañía de los dos le ayudan a sentirse mejor.
“Ella es simplemente la cachorra más gentil, cariñosa y maravillosa que puedas imaginar. Realmente no podía imaginar la vida sin ella”, comentó la mujer al sitio.
Mira uno de sus videos a continuación.
Una situación tan inesperada como la llegada de Andi a la vida de su familia, un hecho que ha mejorado sus vidas con su compañía y ternura. “Realmente necesitaba un alma dulce adicional para agregar a nuestra manada”, dijo Jennifer a The Dodo. Así como tampoco imaginaron que aquel juguete sería tan importante.